Declaración: Expresar beneplácito por la decisión de la empresa “Aerolíneas Argentinas” de reinaugurar sus oficinas en Madrid, capital del Reino de España

Fecha de ingreso: 18.05.2010
Estado: en comisión de “Transportes”
Firmantes: Basteiro, Sergio Ariel – Nuevo Encuentro Popular y Solidario Buenos Aires
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La Cámara de Diputados de la Nación

DECLARA:

Su beneplácito ante la decisión de la empresa Aerolíneas Argentinas de reinaugurar sus oficinas en la ciudad de Madrid, capital del Reino de España.

FUNDAMENTOS

Señor presidente:

“Aerolíneas Argentinas tiene el gusto de informar a cuantos les honran con su confianza que a partir de hoy, día 3 de noviembre quedan inauguradas sus nuevas oficinas en la calle Princesa nº 12, Madrid-8”.
Así rezaba el texto de un aviso a toda página publicado hace casi cuarenta años en la edición matutina del diario español ABC bajo el título “Bienvenido a bordo”, comienza en nuestras oficinas.

La publicidad se completaba con la imagen de una cordial azafata y el slogan que por entonces identificaba a la línea de bandera de los argentinos: “El placer de volar”.

Es de sospechar que aquel esfuerzo publicitario no debe haber repercutido demasiado entre los madrileños de entonces que justo aquel 3 de noviembre de 1970 se aprestaban a participar del “Día de Lucha contra la Represión y por la Amnistía”, una de las más grandes manifestaciones que los opositores de Francisco Franco realizaron en los años previos a la muerte del caudillo falangista.

De este lado del Atlántico, la inauguración de las oficinas madrileñas de Aerolíneas Argentinas tampoco debió haber entusiasmado demasiado. Es que en aquel 3 de noviembre, los argentinos tenían puesta su atención en la hermana República de Chile, donde asumía como titular del Poder Ejecutivo Salvador Allende, el primer presidente socialista electo en una Nación latinoamericana.

Tanto el acto opositor en Madrid como la esperanza que nacía en Chile y contagiaba a la región tenían suficiente magnitud como para opacar lo que -al fin y al cabo- era apenas una iniciativa empresaria.
Sin embargo, aquella iniciativa prosperó y, con el tiempo, contribuyó a imponer la imagen de nuestra aerolínea en una de las más importantes puertas de entrada al continente europeo.

Así ocurrió durante tres décadas hasta que, tras la privatización de Aerolíneas Argentinas, sus nuevos dueños decidieron cerrar las dependencias de la calle Princesa Nº 12. No fue, por cierto, una decisión inocente; se enmarcaba en un proceso más amplio que consistía en el paulatino vaciamiento de la línea de bandera.

Como todos sabemos aquel manejo perverso derivó en la necesidad de rescatar a Aerolíneas Argentinas, hecho que se formalizó a través de la ley 26.412 promulgada el 18 de setiembre de 2008.
Como consecuencia de ese rescate, se recuperaron diez inmuebles que Aerolíneas Argentinas tenía en el exterior; entre ellos, el de la calle Princesa Nº 12.

La reciente decisión de las autoridades de la empresa aérea de reabrir las oficinas madrileñas aparece como un indicio favorable para la ansiada recuperación de Aerolíneas Argentinas.
También resulta promisoria la determinación de compartir el inmueble madrileño con el Instituto de Promoción del Turismo de Argentina (Inprotur) para llevar adelante el común propósito de potenciar la imagen del país como destino turístico.

Con la expectativa puesta en que estas iniciativas sean parte de un proceso integral que revitalice a aquel viejo “placer de volar” en aviones de nuestra flota, solicitamos a nuestros pares la aprobación de este proyecto.